03 Jul
03Jul



Objetivo del estudio:
Evaluar el efecto de una única inyección intradérmica de relleno con PCL (Ellansé-M) en el grosor de la dermis, su reacción histológica, la longevidad del producto y la aparición de efectos adversos.

Metodología: Participantes: 13 mujeres asiáticas (edad promedio: 38.7 años) con piel fina y signos de atrofia dérmica. Intervención: 3 cc de PCL diluido (0.5 cc de producto) inyectado en la dermis facial usando un inyector automático. No se trató la sien derecha (control intraindividual). Evaluación: Biopsias a 2 semanas, 1 año y 4 años. Medición de grosor dérmico por ecografía.

Resultados: Aumento del grosor dérmico: Biopsia a 1 año: +26.7% en grosor dérmico. Biopsia a 4 años: +48.1% de grosor. Ecografía a 1 año: +21.3% de grosor promedio. Hallazgos histológicos: Neocolagénesis confirmada (colágeno I y III). Neoelastogénesis (fibras elásticas nuevas e irregulares). Neovascularización (capilares nuevos). Persistencia de partículas de PCL hasta 4 años. Gran cantidad de fibroblastos y células gigantes tipo cuerpo extraño (no granulomas). Efectos secundarios: Leve edema y equimosis en algunos pacientes (autolimitados). No se reportaron infecciones, nódulos, necrosis ni granulomas clínicos.

Conclusiones: La inyección intradérmica de PCL genera engrosamiento dérmico duradero gracias a la neocolagénesis y neoelastogénesis. Mejora la textura de la piel, reduce poros y líneas finas. La longevidad del PCL intradérmico es de al menos 4 años. Técnica efectiva pero no recomendada para médicos sin experiencia por el riesgo de nódulos si no se maneja correctamente.

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